¿Dependencia o codependencia emocional?
Entre la necesidad y la compulsión en las relaciones interpersonales.
¿Reconoces alguna de estas frases?
"¿Por qué no puede terminar esta relación?"
"¿Cómo es posible que se deje manipular por su familia?"
"¿Por qué sigue haciendo favores a quien le ha lastimado?"
La dependencia emocional y la codependencia emocional son términos que suelen confundirse, pero en realidad describen dos fenómenos diferentes que pueden tener impactos significativos y perdurables en las relaciones familiares y de pareja.
¿Qué es la codependencia emocional?
La codependencia emocional es cuando una persona siente que su felicidad y bienestar dependen completamente de otra persona. Puede pasar en relaciones de pareja, pero también en la familia o con amigos. Es como si la identidad y el bienestar emocional de uno dependieran siempre del otro.
Si notas una de estas características, ¡ojo! Es codependencia emocional
Dificultad para establecer límites saludables: Es complicado decir “no” o poner límites claros. Esto hace que siempre estés disponible para los demás y tus propias necesidades queden en segundo plano.
Falta de identidad propia: Te cuesta encontrar tu propia voz y expresar tus opiniones y sentimientos. Es como si tu identidad dependiera de la aprobación y satisfacción del otro.
Necesidad de control: Sientes una gran necesidad de controlar la situación y las emociones de la otra persona, lo que puede llevar a no respetar sus límites y a interferir en sus decisiones y vida.
Falta de autoestima: Tienes una autoestima baja, te sientes inseguro/a y poco valioso/a. Piensas que tu valor depende de cómo se sientan y actúen los demás hacia ti.
Relaciones disfuncionales: Puedes acabar atrapado/a en relaciones tóxicas porque te cuesta ver los patrones negativos o poner fin a relaciones que te hacen daño.
La codependencia emocional puede afectar gravemente tu bienestar emocional y salud mental. Puede llevar a sentimientos de ansiedad, depresión y baja autoestima, y complicar la capacidad de establecer relaciones saludables y equilibradas.
¿Es lo mismo que la dependencia emocional?
Aunque la dependencia emocional y la codependencia emocional parecen similares, hay diferencias importantes:
Dependencia emocional: Necesitas excesivamente el afecto y apoyo emocional de los demás. Sin la presencia de otra persona, te sientes ansioso o inseguro y te cuesta tomar decisiones por ti mismo. Esto puede ser resultado de una infancia sin afecto o relaciones tóxicas pasadas.
Codependencia emocional: Sientes que eres responsable de la felicidad y bienestar del otro, y tu propia felicidad depende de satisfacer las necesidades de esa persona. Al igual que la dependencia emocional, puede estar condicionada por una infancia con falta de afecto o relaciones previas disfuncionales.
¿Qué hago si sufro de dependencia o codependencia emocional?
Si piensas que puedes estar lidiando con una de estas dos, hay pasos que puedes seguir para trabajar en ello:
Sé consciente de la situación: Reconocer que necesitas ayuda es el primer paso. La codependencia es una forma de adicción emocional y puede ser difícil de superar sin apoyo.
Aprende a decir “no”: Establecer límites y decir “no” cuando alguien te pide algo que va en contra de tus valores o necesidades es crucial.
Practica la autoafirmación: Trabaja en tu confianza y autoestima. La autoafirmación y el autoapoyo te ayudarán a sentirte más seguro/a de ti mismo y menos dependiente de la aprobación de los demás.
Encuentra actividades y relaciones saludables: Busca actividades y relaciones que te hagan sentir bien contigo mismo/a y te ayuden a desarrollar una mayor independencia emocional.
Ambas son difíciles de superar, pero es posible desarrollar una mayor independencia emocional y establecer relaciones más saludables.