Empatía programada
¿Y cuándo ya no es posible distinguir si una conversación es con una persona o una máquina?
Vivimos en una época en la sociedad, especialmente después de una pandemia, en la que vivimos periodos de mayor soledad y reflexión, conectando con nuevos aspectos de nuestra propia humanidad. Como resultado, surge un consenso colectivo sobre el impacto que tuvo este periodo en nuestra forma de socializar y relacionarnos con otros.
Asistimos a un cambio en el tejido social, con amistades más pequeñas, mantenimiento y deterioro de las relaciones interpersonales. Sin embargo, como contrapartida,
Vemos el surgimiento de herramientas de comunicación cada vez más refinadas, que facilitan la construcción de vínculos afectivos y relaciones laborales, entre otros modelos de interacción.
En busca de conexión, los usuarios utilizan los recursos digitales para tener la sensación de estar acompañados, sin llegar a estar cerca. Un ejemplo es la creciente comunidad #JustChatting en Twitch, con millones de seguidores que buscan compañía.
¿Qué significa tener una relación con la máquina?
Diálogos continuos y personalizados: Las conversaciones con las máquinas se vuelven más naturales, fluidas y adaptadas a las individualidades de cada usuario.
Comprender las emociones: Las máquinas reconocen e interpretan emociones humanas, permitiendo interacciones más empáticas y significativas.
Interacción multimodal: La comunicación con las máquinas va más allá del lenguaje verbal, incorporando gestos, expresiones faciales y otras formas de comunicación no verbal.
Creando vínculos y confianza: La capacidad de las máquinas para comprender y adaptarse a los usuarios facilita establecer de vínculos y confianza entre humanos y máquinas.
ALEXA, ¿vamos a hablar?
¡Adiós conversaciones de voz rígidas y hola, charlas triviales y bromas internas!
Existe la promesa de que dejaremos atrás la era de hablar con nuestros dispositivos como si estuviéramos dando órdenes de manera pragmática. Ahora se trata de tener una conversación amistosa, esperando que la tecnología no solo nos escuche, sino que también nos "entienda". Es como si nuestros dispositivos estuvieran saliendo de su adolescencia tecnológica y empezando a captar los matices de la comunicación humana.
¿La apuesta?
Un futuro en el que hablar con A.I. Sea tan natural como iniciar una conversación con alguien de su círculo. Ese viejo cliché del robot aterrador que tanto hemos visto en las películas está dando paso a un nuevo enfoque. Ahora, el enfoque es más el de un amigo digital que a veces nos anima a explorar nuestra propia humanidad, no a quitárnosla.
Incluso esta semana, la empresa OpenAI anunció la nueva versión ChatGPT 4.o, una de las grandes novedades de esta versión es que él entiende los sentimientos del usuario a partir de comprender los patrones en la tonalidad de su voz. Por ejemplo, un padre puede estar con su hijo y pedirle con su voz un cuento para dormir e inclusive la forma en que se lo relate.
¿Por qué esto es impresionante?
Al poder entender la voz natural también puede actuar como un traductor, de forma tal que si dos personas hablan en lenguajes diferentes solo tienen que poner el smartphone entre ellos qué irá traduciendo toda la conversación.
ChatGPT 4.o también entiende imágenes, y si ve al usuario a través de la cámara podrá interactuar con él sabiendo incluso su estado de humor para dialogar de una forma más fluida. Esta capacidad también le permite entender dibujos, objetos y hasta ecuaciones matemáticas.
Este cambio de perspectiva es un signo de los tiempos: buscamos una conexión más "humana" con la tecnología, donde el humor y una nueva definición de empatía no se reinventen.
Otro ejemplo…
Replika AI es una aplicación de inteligencia artificial que ofrece un chatbot personalizado para ser tu amigo virtual. Utiliza una tecnología de aprendizaje automático y avanzado, para adaptarse a tus conversaciones, aprendiendo sobre ti y tus intereses a lo largo del tiempo. Actualmente, la aplicación posee más de 10 millones de descargas en la tienda de Google.
La información de este texto fue traducida y forma parte del TROP | Modo INDICADOR | 2024.