Sinónimo de amor es amar
Desde las antiguas tradiciones hasta la ciencia moderna, el amor transforma nuestras vidas y da sentido a nuestra existencia.
Según la ciencia, el proceso neurológico del amor involucra diferentes partes del cerebro: el hipotálamo, la corteza prefrontal, la amígdala, el núcleo accumbens y el área tegmental frontal.
Añadiendo una pizca de romanticismo, un estudio concluyó que estar enamorado no solo afecta nuestras emociones, sino también nuestras funciones cognitivas más elevadas. Según los investigadores, "esto significa que el amor tiene una función real: no solo para conectarnos emocionalmente con las personas, sino para mejorar nuestro comportamiento".
Pasando a la parte más poética, Albert Camus decía que “amar a una persona significa querer envejecer con ella”. En el otro extremo, Vinicius de Moraes, solo deseaba que "sea infinito mientras dure”.
Para Gandhi, “el amor es la fuerza más sutil del mundo”. En palabras de Nietzsche, “aquello que se hace por amor está más allá del bien y del mal”.
En el libro “El Principito”, Antoine de Saint-Exupéry dijo que “el verdadero amor nunca se desgasta. Cuanto más se da, más se tiene”.
Clarice Lispector, por su parte, nos pide tener cuidado y aconseja: "quédate de vez en cuando solo, si no serás sumergido. Incluso el amor excesivo de los demás puede sumergir a una persona”.
Hay quienes dicen que amar es querer estar cerca. Otros creen que “amar es dejar ir”. Algunos piensan que amar es cuidar y proteger, mientras que otros sostienen que amar es libertad.
Mientras algunos defienden que “amar a alguien es una escuela”, Martha Medeiros afirma que “amar no requiere conocimiento previo ni consulta al historial crediticio”.
Datos curiosos sobre el amor a través de los tiempos
El amor en la Antigua Grecia: Los griegos tenían diferentes palabras para describir las diversas formas de amor. Por ejemplo, "eros" se refería al amor romántico y pasional, mientras que "agape" era el amor desinteresado y universal.
Cartas de amor en la Edad Media: Durante la Edad Media, las cartas de amor eran una forma común de cortejo. Los caballeros escribían apasionadas misivas a sus damas, que eran guardadas como tesoros.
Corazones de San Valentín: La tradición de enviar tarjetas de San Valentín comenzó en el siglo XV. La primera "tarjeta de San Valentín" conocida fue enviada por el Duque de Orleans a su esposa mientras estaba encarcelado en la Torre de Londres.
El primer beso en la pantalla: El primer beso cinematográfico se mostró en 1896 en una película llamada "The Kiss". Esta breve escena fue controversial en su tiempo y marcó el inicio del romance en el cine.
Los anillos de compromiso: El uso de anillos de compromiso se remonta al Antiguo Egipto, donde los círculos simbolizaban la eternidad. Los romanos adoptaron esta tradición, añadiendo la costumbre de colocar el anillo en el dedo anular izquierdo, creyendo que una vena conectaba directamente con el corazón.
La hormona del amor: La oxitocina, a menudo llamada la "hormona del amor", juega un papel crucial en la formación de vínculos emocionales y la confianza entre las personas.
Sea cual sea tu definición, una cosa es segura: es el amor lo que mueve el mundo. Y aunque intentemos menospreciar el sentimiento, solo él —en cualquier forma— es lo que da sentido a la vida.
Queriendo estar cerca o dejándolo ir, todas las caras del amor concuerdan con la cita de Santo Tomás de Aquino mencionada al inicio: “amar significa querer hacer el bien a alguien”.
Para mí el amor es querer hacer feliz, es regalar un trocito de ti a la otra persona, es ser vulnerable esperando que un día las confesiones de “otras vidas” no sean usadas contra ti.
Porque para mí amar es dar un “salto de fé” en la oscuridad. Es esperar lo mejor, sabiendo la finitud de la vida, es elegir la misma persona una y otra vez en los días buenos, pero, principalmente, en los malos.
Que tú puedas vivir el amor en su plenitud y con todos sus matices, sin olvidarse que el mayor amor, antes de todo, es el propio.