¿Alguna vez te has preguntado cómo tu ropa afecta tu estado de ánimo y cómo te perciben los demás? La relación entre la vestimenta y nuestra autoestima es más profunda de lo que podrías imaginar. Según estudios, no solo vestimos para cubrirnos; vestimos para sentirnos bien, para proyectar confianza y para mostrar al mundo quiénes somos. Confeso que, últimamente, estoy proyectando una señora cansada de 33 años de edad.
Siempre dije que no debemos, por ejemplo, esperar tener el cuerpo de los sueños para vestirnos bien, ya que para mí la autoestima es algo que puede si empezar de fuera hacia a dentro. Diversos estudios han demostrado que la ropa que usamos tiene un impacto directo en nuestras emociones y autoestima. Un estudio realizado por la Universidad de Queensland reveló que las personas que vestían ropa que les gustaba y con la que se sentían cómodas reportaban niveles significativamente más altos de autoestima y confianza. La psicóloga Karen Pine, autora del libro Mind What You Wear: The Psychology of Fashion, destaca que ciertas prendas pueden cambiar nuestra percepción de nosotros mismos y afectar nuestro comportamiento y estado emocional.
Percepción social: Líderes y competentes
No es un secreto que la ropa que llevamos también influye en cómo nos perciben los demás. Un experimento de la Universidad de Hertfordshire descubrió que los hombres que vestían trajes de negocios eran percibidos como más confiables, líderes y competentes en comparación con aquellos que vestían ropa casual. Las mujeres que vestían de manera profesional eran vistas como más capaces y seguras de sí mismas. La ropa no solo habla por nosotros; también moldea las percepciones y expectativas de quienes nos rodean.
Por ejemplo, un estudio de estos investigadores mostró que cuando los participantes usaban una bata de laboratorio (que asociaban con la atención y el cuidado), mejoraban su capacidad de concentración y rendimiento en tareas de atención.
Otro estudio, de la Universidad de Columbia, reveló que los estudiantes que vestían ropa formal durante un examen importante no solo se sentían más confiados, sino que también obtenían mejores resultados en comparación con aquellos que vestían de manera casual. Además, en el ámbito laboral, un informe del Journal of Experimental Social Psychology mostró que los empleados que vestían de manera profesional tenían más probabilidades de recibir promociones y oportunidades de liderazgo.
La ropa no es solo “ropa” tiene una intención, Steve Jobs, conocido por su característico jersey negro de cuello alto y jeans. Aunque parecía una elección simple, esta vestimenta se convirtió en una parte integral de su identidad de marca, proyectando una imagen de enfoque y simplicidad y consistencia que resonaba con los valores de su empresa.
Entonces, ¿cómo puedes aprovechar esta información?
Descubre qué ropa te hace sentir bien y segura/o de ti misma/o. No se trata solo de seguir las tendencias, sino de encontrar aquello que te representa.
Recuerda, tú eres lo que vistes. ¡Viste tu mejor versión y deja que el mundo vea de lo que eres capaz!